«Soy Dageus MacKeltar, un hombre con una conciencia buena y trece malas,
arrastrado a saciar mis más oscuros deseos.»
(Karen Marie MONING; Cincinnati, Ohio, Estados Unidos, 1 de noviembre de 1964.
The Dark
Highlander -El Highlander oscuro-, 2002.)
Realmente uno, que nunca ha creído en teorías conspiranoides como clave del mal de tantos para el beneficio de tan pocos,
se encuentra cada vez más tentado de rendirse ante quienes piensan que quienes
realmente nos mandan, los verdaderos amos
del mundo, forman parte de alguna suerte de fuerzas oscuras que se conjuran para fastidiarnos...
Sólo
así se podría justificar que los más egregios representantes de nuestra casta política mientan más que hablan (y
la gente los siga votando), que los más altos magistrados se dediquen a la buena
vida y el lujo a cargo del contribuyente
mientras éste se va quedando ya sin sitio para los agujeros del cinturón de
tanto apretárselo, que la máxima
autoridad del Estado (por la gracia de algún dios, según parece) se dedique
a “meter la pata” entre devaneos varios y asesinatos de elefantes...
En
fin, que parece que alguien muy oscuro y muy ladino, muy hijo de la gran
tiniebla, tiene que estar moviendo los hilos para que seres “tan poco
ejemplares” vayan al copo de nuestras maltratadas instituciones pseudodemocráticas... ¿Habrán tenido alguna vez
siquiera, como Dageus MacKeltar, el “Highlader Oscuro” de Karen Moning, una
conciencia buena?. Desde luego, si es así, se esfuerzan, ocupados exclusivamente
en realizar sus deseos más oscuros aún a costa de provocar el mayor mal para el
mayor número posible de personas, en disimularlo.
Nacho Fernández del Castro, 13 de Junio de 2012
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