« La vida no es fácil, para ninguno de nosotros. Pero... ¡qué importa! Hay que perseverar y, sobre todo, tener confianza en uno mismo. Hay que sentirse dotado para realizar alguna cosa y que esa cosa hay que alcanzarla, cueste lo que cueste.»
(Marie Curie, nacida Sklodowska; Varsovia, Zarato de Polonia, 7 de noviembre de 1867 - Salanches, Francia, 4 de julio de 1934. Fue Premio Nobel de Química en 1911 «[por] el descubrimiento del radio y el polonio, el aislamiento del radio y el estudio de la naturaleza y compuestos de este destacable elemento químico». Ya había recibido el de Física en 1903.)
Cada cual está dotado para hacer alguna cosa bien en algún momento... Nadie es totalmente inútil para todo durante toda su vida (incluso, en último extremo, los "menos dotados" en habilidades específicas podemos acabar dedicándonos a la Filosofía por aquello de que, de alguna manera, "filósofos somos todos"). ¿Qué más alta tarea para la escuela que la de indagar y descubrir las dotaciones de cada quien para valorarlas, estimularlas y poner los medios para desarrollarlas hasta que toda persona encuentre su sitio en el mundo, su objetivo en la vida, su propia e intransferible razón de ser?. Por desgracia esos sitios en el mundo, esos objetivos vitales y esas razones de ser son cada vez más homogéneas y heterónomas, más ajenas a cada ser humano concreto y sus condiciones, más dictadas por los mercados a través de la gran industria mediática de construcción de imaginarios colectivos monolíticos. Y, lamentablemente, la educación institucionalizada forma parte ya de ese engranaje gestor de las representaciones sociales dominantes.
Nacho Fernández del Castro, 2 de Marzo de 2011.
No hay comentarios:
Publicar un comentario