«La Andragogía es el arte y
ciencia de ayudar a aprender a los adultos, basándose en suposiciones acerca de
las diferencias entre niños y adultos.»
(Malcolm Shepherd KNOWLES; Livingston, Montana, Estados Unidos, 24 de agosto de
1913 -
Fayetteville, Arkansas, 27 de noviembre de
1997. The
modern practice of adult education.
Andragogy versus Pedagogy, 1970.)
Pero, más allá de la diversificación de formas de ocio alienante que nuestra sociedad ofrece a la gente madura (tantas veces disfrazadas
de “alta cultura” o, incluso, de “espacio de aprendizaje”), comienza a
ser imprescindible que se desarrolle horizontalmente
(“de arriba” nada bueno cabe esperar, más que nuevas formas de enajenación particular o colectiva) un espacio para desaprender y reaprender, para resocializarnos
críticamente un poco más allá de lo que la sociedad ha hecho de cada cual.
Se me ocurren un montón de cursos y talleres
imprescindibles: “Estrategias para vencer el miedo”, “De la insumisión
como una de las bellas artes”, “Determinación y evaluación de los requisitos mínimos
para la cohesión social”, “Capacitación
terapéutica para la rehabilitación de
corruptodependientes”, “Sobre la ceremonia
del voto: guía de uso”, “Diferencias entre representar personas y representar
personajes: instrucción general para aspirantes a integrarse en la casta política”, “Sobre los beneficios psicosociales
de la disidencia”, etc..
Nacho Fernández del Castro, 25 de Enero de 2013
No hay comentarios:
Publicar un comentario