jueves, 14 de junio de 2012

Pensamiento del Día, 14-6-2012


«¿Hasta qué punto puede un héroe deshonrarse?. ¿Tanto como para perder su alma?. Dhamon Fierolobo, un antiguo Héroe del Corazón, se ha sumido en una amarga vida de crimen y sordidez. Ahora, mientras poderosos dragones, señores supremos de la Quinta Era, conspiran fríamente para consolidar su dominio y destruir a sus enemigos, Dhamon debe encontrar la fuerza de voluntad para redimirse. Aunque tal vez ya sea demasiado tarde.»
 (Jean RABE; Ottawa, Illinois, Estados Unidos, 19 de junio de 1957.  
Downfall, the Dhamon Saga I -El héroe caído-, 2002.)
El viejo canto de los héroes se torna, en estos tiempos sumisos, simple susurro vergonzante... Las antiguas glorias de las almas nobles se transmutan en nostalgias inútiles en la hora de los oprobios globales... Los latidos rebeldes de corazones prístinos apenas son un eco lejano y confuso ante el advenimiento de la gran estafa criminal que llaman crisis.
Y la mayoría, esa a la que siempre le toca llorar mientras unos pocos ríen, comienza, fragmentada y marchita, a autoconvencerse de que todo está ya perdido, de que todo es ya inútil, de que ya es demasiado tarde... O, lo que acaso es peor, a confiar su suerte al albur de alguna oscura y oculta fuerza de voluntad redentora.
Pero el dilema es muy otro... O todos, tirando lastres y recelos por la borda, o, efectivamente, nada.
Nacho Fernández del Castro, 14 de Junio de 2012

No hay comentarios:

Publicar un comentario