Pensamiento del Día, 17-10-2013

«- Pisha
Me dijo el Arcalde,
- Pisha, ¿Tú de qué vas?
Esto es un pueblo de estrellas,

esto es un pueblo de stars.
- Pisha
Me dijo el Arcalde,
- Pisha, ¿Tú de qué vas?
Esto es un pueblo de estrellas,

esto es un pueblo de stars.
Todos somos prisioneros

del pueblo donde nacimos.
Eso sí que es ser vicioso,
Chúpamela pelegrino.
Caminito de Santiago,
rezo pa quitarme el mono.
Súdamela pelegrino,
ayúdame que estoy perdío.
- Pisha
Me dijo el Arcalde,
- Pisha, ¿Tú de qué vas?
Esto es un pueblo de estrellas,

esto es un pueblo de stars.
Dí si estudias o trabajas,
Coges mucho o te haces pajas,
Si en el campo coges flores

o perviertes a menores.
Matacerdos,
Hay que matarlos,
Matacerdos más que nunca,
Matacerdos, Matacerdos...
Dí si estudias o trabajas,
Coges mucho o te haces pajas,
Si en el campo coges flores

o perviertes a menores.
Ví en el cine el otro día,
Como jode la Policía,
Come mierda, dí Pamplona
Yo me voy de Barcelona.
Matacerdos más que nunca,
Más que nunca hay que matarlos a todos.
En Segovia tengo un paria
que me vende cocaína.
Paellita de pastillas con un negro de Valencia.
Me pongo azucar en el pito,
Y me voy a la fiesta del Rocío,
En la Alhambra me la mamas,
y 2 y 2 son 5,

por el culo te la hinco.
Cerdo, matacerdos.
Cerdo.
- Pisha
Me dijo el Arcalde,
- Pisha, ¿Tú de qué vas?
Esto es un pueblo de estrellas,

esto es un pueblo de stars.
Tú haz lo que te dé la gana que al cerdo lo mato yo,
Tu haz lo que te dé la gana que al cerdo lo mato yo.
Más que nunca, hay que matarlos a todos.
Más que nunca; Matacerdos.»

 

 (Albert PLA I ÁLVAREZ; Sabadell, Barcelona, 22 de septiembre de 1966. “Viva Espanya” en el álbum Cançons D'amor I Droga –Canciones de amor y droga-, 2003.)

La cosa no tiene desperdicio... Resulta que los regidores del gijonés Teatro Jovellanos, escandalizados por las declaraciones en las que Albert Pla señalaba que le daba asco ser español, han decidido rescindir su compromiso de alquiler de la sala (a cambio del diez por ciento de los ingresos en taquilla)... Una cosa, ¿en manos de quién está la gestión cultural en esta ciudad (como en tantas otras)?, ¿nadie sabía quién era Albert Pla, qué tipo de espectáculos  hacía, qué tipo de opiniones y actitudes sostenía?... Y, si alguien lo sabía, ¿de qué puede sorprenderse ante semejante afirmación?.

Desde luego, admiro personalmente mucho a Pla (casi diría que, con Pepín Tré, es mi artista cómico-musical favorito)... Admiro, precisamente, su forma de hacer transgresora y políticamente incorrecta, pero también su capacidad para cantar y sostener en un tono tan inverosímil como continuo canciones infinitas y ásperas... Admiro su capacidad para transformar esa aspereza, sin variar el tono, en ternura infantil... Admiro su desenvoltura y descaro en un escenario, eso que le lleva a definirse con la palabra “cómico”, en su versión más denostada. Pero esa admiración importa poco (en realidad, yo ni siquiera había sacado una entrada, aunque sí me lo había planteado).

El caso es que quienes vetan a Pla por su “asco de lo hispano” son quienes están haciendo continuo anatema de cualquier manifestación de nacionalismo (que no sea estrictamente español, claro), son quienes miran con comprensión cómplice los desmanes (pequeños o grandes) filofascistas de sus cachorros, son quienes pondrían el grito en el cielo si a algún ayuntamiento catalán o vasco se les ocurriera vetar a algún artista por poner públicamente en solfa cualquier “tentación soberanista”...

Pero uno nunca ha sido proclive a la devoción por las patrias (ni grandes ni pequeñas, ni con minúsculas ni con mayúsculas), porque nunca ha acertado a ver la supuesta diferencia entre patriotismo y patrioterismo (ambos nacen de la misma percepción distorsionada de alguna ventaja esencial de alguna unidad geográfico-administrativa frente a otras); así que quiere, como muestra del talante de Albert Pla presente en su obra, recomendar a los eminentes gestores culturales del veto que examinen su Viva Espanya... Seguro que encuentran materia suficiente para llevarlo directamente a la Audiencia Nacional por exaltar y enaltecer todo lo peor (desde la pederastia hasta el consumo de todo tipo de estupefacientes, pasando por la promiscuidad o la burla de lo más sagrado).

¡Menos mal que son liberales!... Y defensores de la libertad de expresión.

Nacho Fernández del Castro, 17 de Octubre de 2013